jueves, 29 de enero de 2015

QUITAR EL CHUPETE

No hay un momento determinado para quitar el chupete, como hemos dicho hasta ahora, esto es una cuestión personal. Sí se recomienda que la retirada sea antes de los dos años, pues como dijimos en la entrada anterior, a esta edad son menos los beneficios que aporta y más los inconvenientes que trae.
Se puede decidir quitar el chupete cuándo el bebé es muy pequeño para que no sea tan consciente o bien cuándo es más mayor para que sea el mismo quién se desprenda de él. También se puede decidir, aunque sea más complicado, una edad intermedia, como al año y pocos meses en la que el bebé se da cuenta pero no es capaz de renunciar al chupete por no entender la situación.
Sea cuándo sea, tenemos que tener claro nuestro objetivo y no decaer por ninguna circunstancia.

Imagen de marlopezbuades.es


Cómo dejarlo es otra historia. Existen cantidad de consejos, manuales, libros, pautas… para hacerlo. Podemos recurrir a muchas estrategias existentes o crearnos las nuestras propias.
Desde Gabitep vamos a daros algunos consejos generales que no son ni mejores ni peores que otros que encontréis por ahí, ni tampoco exclusivos. Simplemente os decimos lo que consideramos más favorable para realizar este acto.

1. Decidimos quitar el chupete a nuestro hijo antes de que cumpla los dos años.
2. Elegimos una época en la que vayamos a estar tranquilos en casa. Un momento que podamos prever sin cambios importantes.
3. Es importante estar concienciados pues la implicación de los padres es clave ya que el bebé va a encontrarse más sensible.
Igual de importante es no obsesionarse por no transmitir nuestra ansiedad al niño.
4. Nuestro consejo es tirar todos los chupetes para no decaer. En el momento en que decidimos quitarlo no podemos volver a atrás.
5. Podemos quitarlo de golpe: desaparece y no aparece más en ningún momento; o quitarlo gradualmente: vamos decidiendo en que momentos se quitan y se van aumentando.
Esto va a depender de la frecuencia de uso del chupete por parte del niño.
6. Anticipamos cuándo lo vamos a hacer, concienciando al niño y explicándole que es mayor para llevarlo. De la misma manera buscaremos otras cosas que haga el niño porque es mayor y se lo diremos también.
7. Premiaremos sus logros reforzando sobre todo de forma verbal cuando lo haga por primera vez.
8. El camino puede ser largo y durar días o semanas por lo que no debemos impacientarnos.
9. Durante el proceso son muy importantes los elogios y refuerzos verbales en cada momento del día y sobre todo en el momento en el que se ha dejado el chupete.


Como ya hemos dicho cada caso es único, por ello éstos son unos consejos generales. Posteriormente podemos elegir el método más adecuado a la situación personal y ver qué es lo que mejor funciona con nuestro hijo para deshacernos de su chupete, ya que podemos regalar el chupete, donarlo, esconderlo, romperlo, tirarlo… dependerá de cada caso.

Imagen de libro.



Ana Marco del Rosal
Logopeda y 
Experta en Atención Temprana



jueves, 22 de enero de 2015

¿EL CHUPETE ES BUENO O MALO?

Existe una gran variedad de opiniones por parte de los especialistas con referencia al uso del chupete. Algunos ven más ventajas que inconvenientes; otros, al contrario y otros lo desaprueban totalmente.
A continuación daremos nuestra opinión como especialistas en atención temprana y en el lenguaje, teniendo en cuenta aspectos del desarrollo general de todos los ámbitos: afectivo, sensorial, motor, social y lingüístico.

Como se ha hablado con anterioridad y como sucede con todo en la vida, consideramos que si el chupete se utiliza con precaución evitando su exceso tiene aspectos positivos, pero las ventajas del chupete pueden convertirse en inconvenientes si su uso se prolonga demasiado.
Por otro lado, consideramos que si se logra criar a un niño sin chupete evitaremos generar los inconvenientes que puede conllevar el uso del chupete.
Por tanto, en Gabitep respetamos la decisión de cada padre y cada madre y aconsejamos en función de cada caso.

En general, bajo nuestros conocimientos y teniendo en cuenta los datos que encontramos en las anamnesis de nuestras consultas, resumimos:

VENTAJAS DEL USO DEL CHUPETE:

-   Ejercitación de movilidad de músculos de la zona oral, en los primeros días, para favorecer el agarre al pecho y la succión del pezón para conseguir el alimento.
Imagen de ba.pigeon.com.es

-   Reducción de la muerte súbita (según algunos estudios).
-   Mejora la habituación a la alimentación oral en bebés prematuros, tras haber sido alimentados por sonda.
Imagen de flickr.com

-   Satisfacciones al bebé: entretenimiento, saciedad, consuelo, seguridad y ayuda para dormirse.
-   Favorece la respiración nasal.
-   Mejora la motricidad orofacial.
-   Evita la succión del dedo la cuál es más fácil de quitar.

Imagen de med-ect.com

-   Calma el dolor en la salida de los dientes.


INCONVENIENTES DEL USO DEL CHUPETE:

-   Producción de gas en el intestino por tragar aire al usar el chupete y aumento de cólico del lactante por ello.
-   El uso prolongado puede generar malformaciones en la boca produciendo alteraciones en los dientes y paladar, sobre todo, conllevando esto problemas estéticos, del lenguaje y de la deglución.
Imagen de una mordida abierta

-   Ansiedad ante la falta del objeto, cuándo se crea un vínculo grande.
-   Puede llegar a generar otitis ya que al succionar el bebé adquiere gérmenes que pasan al oído posteriormente.
-  Excesiva dependencia que genera retraso en el lenguaje y con ello dificultades en las relaciones sociales.
-   Aumento de la tasa del babeo.


-   Producción del reflujo gastro-esofágico.

Teniendo en cuenta todo esto, podemos decir que las ventajas suceden al inicio de la vida, hasta el año y medio y los inconvenientes pueden aparecer, salvo el de la producción de gases, a partir de esta edad. Por tanto estas ventajas e inconvenientes nos indican que un bebé no debe usar el chupete más allá de los dos años de edad porque a esta edad es cuándo comienzan a observarse dificultades.

Hasta los dos años, el chupete puede aportar bienestar e incluso podríamos decir, cosas positivas, pero a partir de esta edad no se obtiene nada óptimo del mismo y por tanto su uso genera grandes problemas.


Ana Marco del Rosal
Logopeda y 
Experta en Atención Temprana

jueves, 15 de enero de 2015

CUÁNDO Y CÓMO USAR EL CHUPETE

No existe un momento predeterminado para iniciar la utilización del chupete, de hecho, hay bebés que jamás lo utilizan. Y además recordamos, que el chupete no es un elemento necesario y que son los padres quienes deciden cómo y cuándo utilizarlo.
Se puede empezar a usar el chupete desde que el niño nace. Aunque hay opiniones que consideran que el bebé no debe usar el chupete hasta tener la lactancia totalmente instaurada (en caso de tomar la decisión de dar el pecho al niño) porque el chupete puede interferir en la correcta succión. Otras opiniones, en cambio, dicen que usar el chupete lo más tempranamente posible, cuándo se decide dar el pecho al bebé, es muy beneficioso porque favorece la movilidad de los músculos orales y ayudan a que el agarre y la succión sean más fáciles para el bebé, favoreciendo su alimentación.
Como vemos, todo depende de la opinión de cada uno. Como logopedas, podemos decir que la segunda teoría tiene su lógica, pero ninguna de las dos está totalmente demostrada. Son opiniones de distintos especialistas los que hablan de ello.
En el caso en el que bebé toma biberón, no hay controversias en el inicio de cuándo iniciar el uso del chupete.
Siempre es importante tener claro que no es necesario el uso de este objeto, por ello, como padres, no debemos agobiarnos si nuestro hijo rechaza el chupete.
Además la utilización del chupete también es una tarea aprendida, lo más normal es que el primer día que le damos el chupete al bebé éste no sepa sostenerlo en su boca y se le caiga y le ayudemos sujetándolo, durante varios días, hasta que aprenda.
Por tanto, con referencia a ¿cuándo comenzar a usar el chupete? No hay una respuesta existente. Lo que sí tiene una respuesta contundente es ¿cuándo dejar de usar el chupete? Y ésta es: SIEMPRE ANTES DE LOS DOS AÑOS. Los dos años es la edad tope para llevar chupete, tanto si se usa mucho, como si se usa poco. Porque a esta edad el uso del chupete se convierte en una necesidad y sus consecuencias a nivel del lenguaje, masticación y de los órganos de la boca pueden ser muy negativas.
Hasta esta edad, podríamos plantearnos que incluso el chupete podría aportar algún beneficio, pero a los dos años ya no hay nada positivo que reporte el chupete.
Cómo dejar de usarlo es un tema que abordaremos más adelante, pero tenemos que tener claro la edad tope y proponernos antes de ella el abandono.

Con referencia a cómo usar el chupete, tampoco existe una respuesta única ni verdadera ya que cada niño puede usarlo en un momento y para un fin. Hay niños que sólo lo usan para quedarse dormidos, otros cuándo lloran por algo, otros tienen el hábito de llevarlo todo el día…
Generalmente el chupete se usa para conciliar el sueño, dormir, disminuir la ansiedad cuándo se tiene hambre, calmar rabietas, tranquilizarse… pero el uso que un bebé haga del mismo va a depender de sus padres (de su capacidad de aguante, más bien).
Lo que sí se recomienda es el menor uso del mismo, ya que luego su retirada no será tan dura.


Cómo vemos no hay teorías exactas sobre el chupete y existen tantas opiniones como personas quieran hablar del tema y exponer sus experiencias.


Ana Marco del Rosal
Logopeda y Expta. en Atención Temprana

jueves, 8 de enero de 2015

EL CHUPETE

El chupete es un objeto con una base de plástico que hace de tope, unida a una tetina con forma de pezón que normalmente suele ser de silicona o caucho. Puede ser una pieza o de dos.
Además las tetinas pueden tener múltiples formas destinadas a diferentes momentos.
Imagen de mamapracticas.blogspot.com.es


Lo usan los bebés y su función es producir calma, ya que al disponer éstos, desde el nacimiento, del reflejo de succión, al introducir la tetina en la boca y ser su forma parecida a la del pezón, el bebé succiona consiguiendo calmarse en momentos de cansancio o hambre.
Otro uso frecuente es el alivio que produce ante el dolor de la salida de los dientes.
Otras personas optan por la utilización del chupete al observar a sus bebés succionar el pulgar y siendo éste un hábito más difícil de corregir que el propio uso del chupete.



Por los usos que indicamos, no debería utilizarse el chupete más de los dos años de edad, puesto que su uso puede convertirse en un hábito y llegar a generar problemas de dentición, de anatomía bucal; enfermedades contraídas por contaminación de bacterias; trastornos de habla; aparición de mordida abierta o invertida; nacimiento de llagas en mucosas orales…

Que se utilice o no depende de cada padre y/o madre. Hay niños que no lo quieren a pesar de ofrecérselo, otros que lo usan continuamente, otros cuyo uso se restringe a dormir, otros como efecto calmante de rabietas…
Podemos leer muchos libros y recomendaciones pero verdaderamente somos los padres quienes decidimos cuándo y cómo emplearlo y hasta cuándo hacerlo. Ya que inicialmente el bebé no lo conoce y no lo necesita. Es una decisión pura de los padres en la que no interfiere ningún especialista.
Es por ello que es conocido como un objeto “salvador” para muchas familias por ayudar al bebé a calmarse y dormir.


Pero, ¿por qué el chupete es algo tan importante para los niños?
Ya hemos dicho que a los padres les hace la vida más fácil al calmar rabietas, ayudar a conciliar el sueño, hacer olvidar dolores… pero ¿para los niños?
Los niños nacen con el reflejo de succión, como ya hemos dicho, y gracias a él, consiguen adquirir su alimento. Si además por él logran otros objetivos como calmarse, dormir cuándo están cansados, relajarse ante una situación excitante… se convierte, finalmente, en su mejor objeto, en algo que forma parte de ellos y de lo que no pueden separarse. Por ello cuesta tanto su retirada, siendo peor cuánto más mayores son los niños y por tanto más conscientes; pues cada vez se genera más necesidad del uso del chupete.
Además, debemos saber, que el primer año el niño se encuentra en una “fase oral” en la que descubre y experimenta por su boca y descubrir el chupete es un complemento ideal. Ya que cuando el niño tiene sueño, está molesto, enfermo, cansado… quiere buscar algo para chupar.

Imagen de imagebesdecaricatura.com


Es importante hacer un uso adecuado del chupete:
-   Para que no interfiera negativamente en la lactancia. Para ello ofrecerlo cuándo sea estrictamente necesario en el primer mes de vida.
-   Elegir un chupete adecuado a la edad del adulto.
-   Que el chupete esté homologado y cumpla con las medidas indicadas para que no se convierta en un peligro.
-   No emplear cadenas que lo atan a la ropa para que no se extravíe, ya que estás pueden generar importantes accidentes.
-   Esterilizarlo con frecuencia, sobre todo los primeros meses.
-   Si se cae al suelo lavarlo con agua no limpiarlo metiéndolo en nuestra boca.
-   Cambiar el chupete cuándo esté deteriorado. Algún fragmento del mismo puede producir asfixia.


A modo de curiosidad, os diremos que chupete en inglés es “pacifier” que significa pacificador.

Ana Marco del Rosa
Logopeda y 
Experta en Atención Temprana

miércoles, 7 de enero de 2015

INTRODUCCIÓN ENERO

Son frecuentes las consultas en la especialidad de Logopedia sobre dificultades en el habla o en la deglución. Al realizar un examen exhaustivo de los órganos bucofonoarticulatorios observamos dificultades en dientes, mandíbula, labios o paladar debido a un uso excesivo del chupete.

Es por ello que durante el mes de enero, vamos a hablaros de este objeto, tratando de explicar su morfología, utilidad y consecuencias positivas y negativas, así como lo que ocurre cuándo se realiza un uso exagerado del mismo.