No hay un
momento determinado para quitar el chupete, como hemos dicho hasta ahora, esto
es una cuestión personal. Sí se recomienda que la retirada sea antes de los dos
años, pues como dijimos en la entrada anterior, a esta edad son menos los
beneficios que aporta y más los inconvenientes que trae.
Se puede decidir quitar el
chupete cuándo el bebé es muy pequeño para que no sea tan consciente o bien
cuándo es más mayor para que sea el mismo quién se desprenda de él. También se
puede decidir, aunque sea más complicado, una edad intermedia, como al año y
pocos meses en la que el bebé se da cuenta pero no es capaz de renunciar al
chupete por no entender la situación.
Sea cuándo sea, tenemos que
tener claro nuestro objetivo y no decaer por ninguna circunstancia.
Imagen de marlopezbuades.es
Cómo dejarlo es otra historia.
Existen cantidad de consejos, manuales, libros, pautas… para hacerlo. Podemos
recurrir a muchas estrategias existentes o crearnos las nuestras propias.
Desde Gabitep vamos a
daros algunos consejos generales que no son ni mejores ni peores que otros que
encontréis por ahí, ni tampoco exclusivos. Simplemente os decimos lo que
consideramos más favorable para realizar este acto.
1. Decidimos quitar
el chupete a nuestro hijo antes de que cumpla los dos años.
2. Elegimos una
época en la que vayamos a estar tranquilos en casa. Un momento que podamos prever
sin cambios importantes.
3. Es importante
estar concienciados pues la implicación de los padres es clave ya que el bebé
va a encontrarse más sensible.
Igual
de importante es no obsesionarse por no transmitir nuestra ansiedad al niño.
4. Nuestro consejo
es tirar todos los chupetes para no decaer. En el momento en que decidimos
quitarlo no podemos volver a atrás.
5. Podemos quitarlo
de golpe: desaparece y no aparece más en ningún momento; o quitarlo
gradualmente: vamos decidiendo en que momentos se quitan y se van aumentando.
Esto
va a depender de la frecuencia de uso del chupete por parte del niño.
6. Anticipamos
cuándo lo vamos a hacer, concienciando al niño y explicándole que es mayor para
llevarlo. De la misma manera buscaremos otras cosas que haga el niño porque es
mayor y se lo diremos también.
7. Premiaremos sus
logros reforzando sobre todo de forma verbal cuando lo haga por primera vez.
8. El camino puede
ser largo y durar días o semanas por lo que no debemos impacientarnos.
9. Durante el
proceso son muy importantes los elogios y refuerzos verbales en cada momento
del día y sobre todo en el momento en el que se ha dejado el chupete.
Como ya hemos dicho cada
caso es único, por ello éstos son unos consejos generales. Posteriormente
podemos elegir el método más adecuado a la situación personal y ver qué es lo
que mejor funciona con nuestro hijo para deshacernos de su chupete, ya que podemos regalar el chupete, donarlo,
esconderlo, romperlo, tirarlo… dependerá de cada caso.
Imagen de libro.
Ana Marco del Rosal
Logopeda y
Experta en Atención Temprana