sábado, 30 de noviembre de 2013


LA INTERVENCIÓN EN LA DISLEXIA

 Tras la evaluación y diagnóstico de la dislexia, la intervención se debe centrar en cuatro ámbitos: el propio niño, el entorno escolar, el familiar y el social.

·        La intervención personal tiene como objetivo analizar y cuidar el estado emocional del niño/a así como desarrollar el tratamiento terapéutico necesario bien desde el colegio bien con especialistas externos al centro, como nosotros desde el gabinete. El tratamiento recoge una serie de estrategias metodológicas (visuales, auditivas y motrices) para mejorar los aspectos relacionados con la lectura, escritura y cálculo. Se desarrollan a través de actividades de lectura (p.e. listado de palabras que falta una letra, lectura global), de escritura (p.e. escribir palabras a partir de signos, método de ortografía ideovisual), de cálculo (p.e. aprendizaje de tablas de multiplicar con dibujos)…Además, en la intervención también se tratan aspectos cognitivos relacionados con  la atención, la memoria, la orientación, percepción, secuenciación, coordinación psicomotriz…

·        La intervención escolar está enfocada al desarrollo de medidas educativas necesarias (adaptaciones curriculares) para que el alumno pueda acceder al currículo desde sus capacidades y respetando su ritmo de aprendizaje. Desde el gabinete se establece una coordinación con el colegio sobre la intervención psicopedagógica que se está haciendo con el alumno/a para realizar un trabajo en equipo que favorezca el progreso en el tratamiento.

·        La intervención familiar tiene como finalidad informar sobre el tratamiento psicopedagógico que recibe desde el gabinete, asesorar sobre pautas que le ayuden en su proceso de enseñanza -  aprendizaje, comentar las relaciones de coordinación con el colegio del alumno/a y proporcionar información sobre asociaciones y  recursos externos beneficiosos para aprendizaje y desarrollo personal del niño/a. 

·        La intervención social para sensibilizar al entorno más cercano de lo que supone la dislexia y  las necesidades que genera.


         Desde el gabinete se realizan estas intervenciones, en sesiones de 30 o 45 minutos, dependiendo del caso, con una frecuencia de dos días a la semana, llevando a cabo un estrecho seguimiento del tratamiento en contacto con las familias y los colegios donde acuden nuestros niños.

Lorena Henche González
Psicopedagoga.




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