"Había una vez una zorra muy hambrienta. Conocia una viña en la que habia unas uvas fabulosas, pero una amiga le habia contado que la vigilaba un terrible mastín . Se acercó a la viña y vio a lo lejos un magnifico racimo. Se quedo mirandolo un buen rato, pero la figura del mastín le venia con fuerza a la mente. Finalmente se dio la vuelta y se dijo a sí misma - No me gustan, no estan maduras" .
Los miedos y dificultades para obtener lo que queremos nos pueden inducir a engaño haciéndonos creer que, en realidad, lo que queremos es no sentir miedo, en lugar de permitirnos desear lo que nos gusta. La zorra podría haber llegado a pensar que realmente lo que no quería era pasar miedo, ignorando sus deseos y necesidades mas elementales.
PONER NUESTRA MENTE AL SERVICIO DE NUESTROS DESEOS
No dejemos que el miedo impida alcanzar nuestros deseos.
Podemos confeccionar una lista de miedos y comenzar por el que menos miedo nos de,no sera fácil, pero se van superando y es muy gratificante.
Otro paso importante es aprovechar cualquier ocasión que nos parezca que nos ofrece alguna posibilidad de avanzar hacia nuestro objetivo, vencer el miedo, sin temor al fracaso.
El miedo nos animará a no hacer aquello que deseo, nos aconseja evitarlo, pero no hay que pelearse con él, no hay que discutirle, estaríamos discutiendo con nuestra mente. Tampoco hay que hacerle caso, tendríamos un alivio inmediato, pero abandonaremos muchas cosas importantes en nuestra vida y esto, nos hará sufrir.
En lugar de ello, seguir adelante y arriesgarnos.
No podemos dejar de escucharle, ni de sentir la sensación que nos causa. Pero seguiremos el rumbo que hemos elegido. Haremos todo lo necesario para conseguir lo que deseamos, sintiéndonos nerviosos y arriesgándonos al fracaso.
Ana Pérez Gómez
Psicóloga
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